He perdido un dia de mi vida. No pude vivir completamente el sábado. Me siento de la chingada, estoy enferma de todo.
Cuando me estreso, unas ronchas como de mosquito invaden mi cuerpo, tengo una comezón terrible que no me deja en paz. Me hace daño la comida, ya no puedo comer igual, porque me da náuseas o me duele el estómago. El viernes, cometí la peor pendejada del mundo, lo peor es que no lo supe hasta que otros me dijeron. ¿Qué pasa conmigo?
Aunque la parte que más me preocupa es la del viernes. ¿En qué momento perdí el control de mis acciones? No lo sé. Tengo vagos recuerdos de lo que sucedió y en ninguno está el de mi mayor estupidez.
Todo parece una pesadilla terrible. Escenas revueltas de lo que pasó y momentos perdidos en mi memoria.
Solo algunos instantes preciosos que pasé puedo recordar con una sonrisa que luego se opaca, por el olvido de una parte importante que jamás me perdonaré.
Me siento fatal. No merecería a un persona como tú, jamás. Te decepciono, te lastimo, te extraño, te quiero y simplemente, no puedo estar contigo; y ahora con más razón por esto. Me ha dolido quererte y apartir de hoy me sentiré culpable.
Tal vez, no me creas, pero mi corazón se alegra por quererte tanto a ti. Que mi corazón hoy llora, por seguirte queriendo igual y haber cometido un error tan grave que no quise hacer.
Quiero desaparecer y quiero explicarte todo lo que pasa por mi mente. Quiero dejarte en paz, no quiero volver a ser una molestia y que puedas ser feliz.
Voy a desaparecer en cualquier instante. Con lágrimas y pesar porque aun te quiero, pero ya nadie me podrá ver.
Ma abandono a una nueva vida, donde a nadie pueda tocar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario